16.5.09

SOMOS LO QUE DISCUTIMOS

El humano es pensamiento, ya lo dijo el filósofo, “cogito ergo sum”: pienso luego existo. Pensar nos hace humanos, la humanidad se construye, se ha construido, en el pensamiento que evoluciona en relación estrecha con la realidad económica.

Ahora bien, el pensamiento se forma principalmente en la discusión, en el examen conjunto de una materia. Podría definirse al humano como el animal que piensa y discute.

Discutimos, pensamos, desde la vieja que chismea lavando ropa en un río, hasta el científico que expone un trabajo novedoso en un congreso. Si pudiéramos oír el sonido típico de la humanidad, este sería el murmullo de la discusión.

Entonces, una sociedad tendrá la calidad de los temas que discute, será los temas que discute, somos lo que discutimos.

Siendo así, la clave de la dominación reside en la calidad de los asuntos que la sociedad examina. Veamos.

Las clases dominantes tienen interés en que la sociedad dominada no reflexione asuntos importantes para su liberación, su labor de dominio descansa en llenar la mente social de trivialidades y desterrar las ideas “peligrosas”, las que cuestionan la dominación.

La Revolución es un cambio radical en la manera de pensar una sociedad y en los asuntos que se piensan, sin ese cambio no hay revolución. El enfrentamiento con la oligarquía es, en el fondo, el enfrentamiento de dos pensamientos.

De todo esto se deduce que, para una Revolución es fundamental la discusión, el contenido y la forma, los asuntos que se discuten y cómo se discuten.

Es importante estar atento a la discusión en el pueblo, no es un asunto para dejar a la improvisación, una de las funciones esenciales del partido, de la vanguardia, es dirigir esta discusión, dotarla de una lógica diferente a la lógica que el oligarca intenta imponer.

Cometemos error gravísimo cuando polemizamos con el enemigo como si de una pelea personal se tratara, cuando llenamos la confrontación de argumentos menores, que califican a las personas, pero no explican los hechos, no los colocan en sus relaciones con otros eventos.

Y cometemos error gravísimo, cuando los eventos importantes, los logros de la Revolución, son despachados de forma ligera, sin explicación, no son preocupación, no se colocan en el camino general de la Revolución, no se analizan sus repercusiones en el futuro de la sociedad.

Los dirigentes revolucionarios tienen una gran responsabilidad, ellos son educadores, sus declaraciones, sus actuaciones, son ejemplos, lecciones para el resto de la sociedad.

Una acusación de un dirigente, una amenaza, un reto, se transforma en una línea política, en una propuesta, determina el rumbo de la discusión, de la sociedad. No pueden ser lanzadas a la ligera, no es un asunto trivial.

El partido es instrumento principal para la educación política de la sociedad, sus acciones, sus campañas deben ser planificadas teniendo esa función en cuenta, deben romper los estrechos límites de su territorio, irradiar a la sociedad, señalarle lo importante, llenar sus reflexiones, conducirlas.

¡Discutir lo Importante!

¡Chávez es Socialismo!

15.5.09

LA IMPORTANCIA DE PENSAR EL AMOR

Hoy en Venezuela es vital el pensamiento, la suerte de la sociedad se decidirá allí, en la mente. La batalla de hoy es, como nunca, una batalla de ideas, ellas regirán todo el proceso, el desenlace dependerá de ellas.
La suerte del mundo se decide aquí en la América, y es Venezuela el centro de lo que pasa en el continente. Es fácil comprender que el imperio nos tenga como su objetivo principal, nos ataca con ferocidad, usa su mejor arma contra nosotros: la inteligencia.
El imperio nos ataca con astucia, somos víctimas de un experimento inédito de guerra de cuarta generación dirigida al alma del pueblo, a su mente.
Globovisión, las televisiones oligarcas, son muestra de esta guerra: su programación está al servicio del degollamiento de la Revolución, nada allí es inocente.
Se engañan los que piensan que el daño está en lo evidente, que globovisión es más dañina y peligrosa que las otras, que Venevisión, por ejemplo. ¡No es así!
Todas esas televisoras, los periódicos, las radios, cines, teatros, la iglesia, las vallas, forman parte de un entramado psíquico de dominación que dirige sus mejores proyectiles a la mente, a la conciencia, infringe los valores de la liberación: la fraternidad, el amor, la visión social.
Por eso cerrar o no un canal escuálido es una medida que puede traer algún beneficio, quizá, pero estaremos luchando en la superficie, en el reflejo del fenómeno, no en el fenómeno, y menos en sus causas.
Y al no presentar batalla en el centro del problema, al distraernos con medidas aparatosas pero ineficaces, estamos contribuyendo, por omisión, a que la labor destructiva del enemigo siga haciendo mella en nuestras bases.
En esta guerra de cuarta generación debemos ir al fondo, pelear allí donde es importante, en los valores, en la ética y en su base material: la economía, las relaciones de propiedad.
Defender la necesidad de una nueva manera de relacionarnos, de establecer relaciones amorosas, fraternas, en contraposición con las relaciones egoístas, el estímulo al odio, la soledad donde se sustenta el capitalismo: he allí el centro de la confrontación.
Es partiendo de esa espiritualidad que se debe explicar la necesidad de la Propiedad Social de los medios de producción como sustentadores de la nueva relación amorosa.
Y es allí donde reside la importancia de las socializaciones que emprende el Gobierno Revolucionario.
Y esa es la esencia de la lucha que libramos.
Es necesario discutir los actos del gobierno, y discutirlos con esta visión, son actos de impulso a una relación amorosa, única manera de salvar al planeta.
Los revolucionarios debemos rescatar las relaciones amorosas, defenderlas como el centro del afán socialista, difundirlas, ellas son el objetivo principal del Socialismo.
Como nos dijo Martí, la guerra nuestra debe ser una guerra por el amor, así seremos invencibles. Los que luchan por el amor tienen muchísima más fuerza que los guiados por el odio.
¡Socialismo es amor!
¡Chávez es Socialismo!

14.5.09

SITUACIÓN NACIONAL

Después de las elecciones regionales el paisaje político cambió, los oligarcas lanzaron su llamado a pacto, justificándolo con la crisis mundial del capitalismo, pretendían con esto que la crisis se resolviera a favor de la burguesía, al tiempo que desmovilizaban a la masa.
El Gobierno Revolucionario no cayó en la celada, y con celeridad rechazó el pacto, anunciando que la crisis del capitalismo se enfrentaría con medidas socialistas que amortiguaran el impacto sobre los humildes. Esta decisión correcta de proteger a los humildes y usar la renta para la construcción de una sociedad socialista, indicaba claramente al pueblo y a los oligarcas que esta revolución es verdadera.
De esta manera superamos la Fase de Cohabitación con el capitalismo que necesariamente atraviesan las revoluciones pacíficas, fase de peligros sutiles, cargada de tentaciones, y donde muchas revoluciones han zozobrado, bien sea porque claudican o porque pierden el rumbo, se debilitan y son derribadas por las clases dominantes.
La Revolución ha tomado una serie de medidas que concretan su propuesta frente a la crisis: ha golpeado directamente poderosos intereses económicos. De esta manera entramos en la Fase de Confrontación de la Revolución Pacífica. Debemos estudiarla, pensarla, para poder seguir avanzando con éxito.
La Fase de Confrontación se despliega cuando los oligarcas pierden las ilusiones de mediatizar a la Revolución , de enredarla en legalismos tontos, de desgastarla, paralizarla, entonces desechan las salidas constitucionales, corren de prisa hacia salidas violentas.
La Fase de Confrontación impone una nueva situación, ahora se produce necesariamente un cambio en la composición de los bloques que se enfrentan, los esquemas de la primera fase, la cohabitación, no abarcan el nuevo cuadro.
Ahora los bloques serán Socialista o Nosocialista.
El bloque Socialista, así lo va dictando la marcha de la realidad, se perfila por la actitud frente a la propiedad de los medios de producción, es decir, se llegó a la raíz, a la esencia del Socialismo: “La propiedad social de los medios de producción es uno de los pilares del Socialismo”.
Esta definición traerá como consecuencia inexorable un deslinde dentro del proceso, que se manifestará primero como desgano, luego saboteo franco y, por último, separación, que ocurrirá precedido de agresiones internas a los baluartes de las posiciones socialistas.
El campo enemigo recrudece su oposición, los oligarcas buscan desesperadamente salidas a lo que califican de dictadura en las que se cerraron las soluciones institucionales y pacíficas. Esto es muy importante tenerlo en cuenta porque indica que la salida a la confrontación de los dos bloques no está en el territorio de las elecciones, sino en el campo de la confrontación cruenta.
La salida violenta nos impone profundizar las labores ideológicas, el centro de la estrategia violenta es la ideología, es desde allí que debilitan a las revoluciones y preparan el zarpazo definitivo.
El imperio da señales que aclaran el panorama, sus embestidas a Cuba, sus definiciones sobre Venezuela los delatan como arquitectos de las salidas violentas.
¡Chávez es Socialismo!

13.5.09

IMPORTANTE PELIGRO

Uno de los peligros más importantes de las revoluciones es separarse de las masas, y esto sucede por incomprensión de las acciones de la dirigencia. Así la masa rompe la conexión con sus conductores, se desconcierta y va a la deriva, se desespera o se desencanta.
Esto es más importante en una Revolución Pacífica, que tiene una fase de cohabitación con el capitalismo, con sus leyes, con sus valores, cultura, costumbres.
En estas condiciones es fácil que las masas se extravíen, que la dirección se difumine en los vapores del pasado o en las estridencias del futuro.
De allí que la Revolución Pacífica debe tener especial cuidado en la explicación de sus pasos, en ganarse a la masa para esos pasos, en no perder el ritmo revolucionario y hacer que la masa marche a ese ritmo.
Debe tener cañones ideológicos que neutralicen a los cañones que alimentan a los medios de desinformación enemigos. Sabemos que tanques pensantes extranjeros están financiando y nutriendo a las campañas ideológicas oligarcas, un claro ejemplo de esto son las campañas del cedice.
La tarea de informar y ganar comprensiones para las medidas revolucionarias debe ser constante. Ninguna acción revolucionaria debe quedar huérfana, todas deben ser acompañadas de una campaña explicativa. Podríamos atrevernos a decir que igual o mayor importancia tiene la explicación de una medida que la medida misma.
Ahora bien, la batalla ideológica, tan importante en la Revolución Pacífica, es tarea de todos los revolucionarios y sus organizaciones, en ella deben participar los partidos, las mesas técnicas, los consejos, todos deben participar en la discusión, la explicación de las acciones revolucionarias.
Y todos debemos involucrarnos en el combate a la manipulación y a la deformación oligarca, en desenmascarar a la oligarquía.
Ahora cuando la Revolución ha emprendido una importante ofensiva contra las perversidades económicas del sistema capitalista, es una buena oportunidad para aceitar nuestra estructura ideológica.
Las Escuelas de Cuadros deben explicar desde la teoría la importancia de las medidas tomadas en el sector petrolero, ubicarlas en el camino de la construcción del Socialismo, relacionarlas con las medidas tomadas en el campo.
El Partido debe tener como una de sus acciones principales la explicación de estas medidas, la nueva situación que crean, debe ser instrumento, correa para llevar la discusión y la explicación al centro de las masas.
Podemos decir que la conexión duradera y fuerte de la dirigencia revolucionaria con la masa se sostiene en la ideología, la cultura, la formación, la información. Y ya sabemos que sin esa conexión no hay revolución posible. De allí que la ignorancia es contrarrevolucionaria, y la cultura es revolucionaria. No puede haber Revolución sin Cultura Revolucionaria.
Y el principal pilar de la cultura revolucionaria es el conocimiento de la Revolución, conocer para dónde va, qué hace, por qué lo hace.
La Revolución Bolivariana avanza, y con ese avance se elevan las exigencias a los revolucionarios, que deben ser cultos, conocer a su Revolución.
¡Socialismo es Cultura!
¡Chávez es Socialismo!

12.5.09

LA AURORA DEL SOCIALISMO

La aurora del Socialismo ilumina el horizonte de la Patria, hacia allá vamos. Las últimas medidas tomadas por el Gobierno Revolucionario marcan el rumbo certero.
Las recientes socializaciones de las operaciones petroleras que aún estaban en manos de antisociales, de nosociales, sumadas a las socializaciones en el campo, indican la intención de la Revolución de construir una economía de Propiedad Social administrada por el Estado que sirva de soporte a la Conciencia del Deber Social, en otras palabras, construir los pilares del Socialismo, de una nueva manera de vivir, zafarnos de la perversidad del capitalismo.
Esta concreción del camino hacia el Socialismo necesariamente produce en el bando oligarca una reacción definitiva. Ya la confrontación alcanza nuevamente niveles de “suerte echada”, hemos cruzado el Rubicón, quemado las naves, la Revolución es verdadera.
De esta nueva realidad se desprende una ofensiva enemiga feroz, como nunca hemos sufrido, superior en crueldad y astucia al sabotaje petrolero y al golpe de abril. Todas las fuerzas imperiales apuntan a la Revolución y al Comandante.
Ya nadie duda que preparan un golpe, se discute sólo cómo será, cuándo, pero es unánime la opinión de que todas las aguas conducen a los límites de la confrontación.
Es paradójico, asombroso que esta nueva realidad no produzca una reacción urgente en el campo bolivariano. Veamos.
Los movimientos socializadores dados por el gobierno no despiertan la emoción que deberían, eso es una falla nuestra, no hemos sabido explicar su importancia para el camino en la construcción de la nueva sociedad, de las nuevas relaciones, el apoyo ha sido tímido, convencional.
Los movimientos golpistas del enemigo no suscitan la reacción que merecen, nos limitamos al diagnóstico, no tomamos medidas.
Por ejemplo, descubrimos un arsenal oligarca, con fusiles de francotirador, explosivos de alta potencia, y presentamos eso como un hecho policial, como si se tratara de una banda de malandros. No le damos importancia política, los partidos deben inmediatamente pronunciarse, alimentar el análisis, la percepción de la sociedad.
Se trata de un intento de magnicidio, de un importante intento de subversión, que debe ser discutido por la masa bolivariana.
Es tarea de los revolucionarios colocar estos hechos en el centro de la discusión del pueblo, relacionarlos con las medidas que ha tomado el gobierno, determinar a los autores intelectuales, guiar la discusión y la preparación de las respuestas, esa es la esencia de la lucha política.
Es necesario corregir estas fallas, tomar conciencia de la turbulencia que atravesamos, dar el salto en nuestra práctica política, fomentar la unidad de los chavistas, entender que la suerte de uno es la suerte de todos, y el triunfo de uno es el triunfo de todos, que no hay más objetivo que el apoyo a la Revolución y al Comandante Chávez.
Estamos seguros, la historia así lo indica, que vendrán nuevas medidas de parte nuestra, y vendrá un recrudecimiento de la embestida burguesa. Estamos viviendo época estelar, fundando un mundo nuevo, es necesario que nos elevemos a esas alturas.
¡Chávez siempre Socialismo!

11.5.09

TAN MALO ES CREER, COMO NO CREER

Tan malas son las posiciones dogmáticas, aquellas que hacen del conocimiento un ladrillo calcificado que no evoluciona, que no se adapta a las nuevas circunstancias del tiempo y del lugar, como también son dañinas las posiciones que ignoran toda la experiencia teórica y práctica del esfuerzo revolucionario de la humanidad.
No se puede inventar sin estar apoyado en la experiencia universal, sería improvisación, intentar hacerlo es el peor de los despilfarros vitales. Por ese camino daremos vueltas en círculos, para encontrar, después del fracaso, que sólo intentábamos descubrir el agua tibia, o que la tierra es redonda.

Fidel nos ilustra magistralmente esta situación en el acto por el aniversario 60 de su ingreso a la universidad, efectuado en el Aula Magna de la Universidad de La Habana el 17 de noviembre de 2005, donde nos dice:

… “Una conclusión que he sacado al cabo de muchos años: entre los muchos errores que hemos cometido todos, el más importante error era creer que alguien sabía de Socialismo, o que alguien sabía de cómo se construye el Socialismo.”

Se refiere a los dogmáticos, que querían trasladar fórmulas de manera mecánica. Pero más adelante, en el mismo discurso, añade:

“Hubo quienes creyeron que con métodos capitalistas iban a construir el Socialismo. Es uno de los grandes errores históricos. No quiero hablar de eso, no quiero teorizar; pero tengo infinidad de ejemplos de que no se dio pie con bola en muchas cosas que se hicieron”.

Nos ilustra Fidel que el dogmatismo es el problema. Es decir, el traslado mecánico de las experiencias universales, pero que es de esas experiencias de donde el revolucionario debe nutrirse, con el espíritu amplio, para adaptar ese conocimiento a sus realidades. Es así que debemos entender el “inventamos o erramos” o “el error de creer que alguien sabía cómo se construye el Socialismo”.

Más adelante, en el mismo discurso, Fidel concluye:

“Hoy tenemos ideas, a mi juicio, bastante claras, de cómo se debe construir el Socialismo, pero necesitamos muchas ideas bien claras y muchas preguntas dirigidas a ustedes, que son los responsables, acerca de cómo se puede preservar o se preservará en el futuro el Socialismo”…

Las revoluciones deben aprender mientras caminan, deben innovar, enriquecer la teoría y la práctica, deben inventar, errar, luchar contra la tentación dogmática. Todo eso es verdad. Pero el peligro más importante de las revoluciones en el trópico, de esta Revolución Bolivariana, es la desviación pequeño burguesa, que surge con fuerza en cada esquina, detecta resquicios, debilidades, y por allí inyecta el extravío.

Amparados en “la necesidad de inventar”, embisten contra las bases mismas del Socialismo, contrabandean las armas melladas del capitalismo, pretenden construir el Socialismo sin superar al capitalismo.

Es necesario, entonces, explorar las características propias de nuestro Socialismo, pero cuidando que sea Socialismo, esto es, que rescate la Conciencia del Deber Social entrelazada con la Propiedad Social de los medios de producción. Sobre esos pilares construir.

¡Unidos con Chávez avanzaremos hacia el Socialismo!

10.5.09

EL AUSENTE

Estamos en medio de una ofensiva imperial de alta factura. Atrás quedaron las bravatas y estupideces de Bush, se trata ahora de una maniobra estratégica que resume todo el conocimiento en subversión que el imperio ha acumulado en siglos de arbitrariedades en el mundo, aquí contra nosotros aplican lo que saben, y ensayan nuevas técnicas.
Estamos en medio de una guerra sutil, pero peligrosísima, requiere de nuestra más acabada inteligencia para enfrentarla. Veamos.
Uno de su principales objetivos es desmovilizar a la base chavista, ellos saben que revolución que no moviliza, es estanca y se muere.
La revolución se hace, los revolucionarios aprenden en el movimiento común, juntos luchando por objetivos altruistas, es allí en la acción conjunta, en la movilización, que se fraguan Revoluciones y Revolucionarios.
Para desmovilizarnos usan varias armas, la deformación mediática es una de las más importantes, desprestigian dirigentes, siembran rumores, se cuelan en nuestras debilidades y vanidades.
Estimulan egoísmos, aúpan teorías aislacionistas, que no integran a la sociedad. Se apoyan en extravíos de la revolución. Saben lo que quieren, su objetivo es un pueblo espectador y no actuante.
En contraste, y que nadie se engañe, los oligarcas no necesitan movilizar a su base, allí el objetivo es otro y de signo contrario, se realiza en lo individual que es donde se estimula el egoísmo, el miedo que es la base de su poder.
A ellos les basta con elevar el odio a niveles de disociación, de esquizofrenia, para tener una base social capaz de aceptarlo todo con tal de salir de Chávez y de la Revolución. Una base social que perdió cualquier referencia ética, es un mecanismo similar al que lleva a pueblos a aceptar genocidios o los crímenes más repugnantes.
Los oligarcas, debemos reconocerlo, han avanzado en sus propósitos, el resultado está a la vista: tienen una base completamente disociada, incapaz de cualquier razonamiento, sólo se saciará con la sangre de patriotas, con la salida de Chávez.
Y han conseguido que el pueblo chavista sea cada vez más espectador que actuante.
La Revolución avanza en lo económico: socializa tierras y fábricas, protege el empleo, mantiene las asistencias sociales, mantiene un ambiente de libertad como nunca se vivió en este país, recupera puertos y aeropuertos.
No pasa un día sin que el gobierno tome acciones a favor de la sociedad. Sin embargo, son pasos en solitario. El pueblo chavista, el pueblo organizado no participa, y ni se entera, no se moviliza.
Esta situación es de grave peligro, es urgente que se corrija. Las acciones de la Revolución deben tener como objetivo importante preparar a la gente para la movilización, esa debe ser una medida del éxito.
Los Consejos Comunales, Las Mesas Técnicas, Los Partidos, Los Sindicatos, deben ser, antes que todo, agentes de movilización.
Una acción, una estructura organizativa que no moviliza, que no acompaña las acciones revolucionarias debe ser revisada, no está cumpliendo su papel “el papel de los revolucionarios es hacer la revolución y defenderla”.
¡Socialismo es Movilización!
¡Chávez es Socialismo!